Desde MarQuid Consulting damos suma importancia a los datos y cumplimiento de objetivos dentro del marketing y de las acciones planteadas por o para nuestros clientes. Quiero relacionar este post con uno que hemos publicado hace unos meses, Pautas para asegurar el cumplimiento de los objetivos propuestos en el plan estratégico de marketing. En este post definíamos los puntos clave a tener en cuenta para fijar los objetivos de cada una de las acciones propuestas en el plan de marketing. Estos 8 puntos expuestos son básicos para que los objetivos puedan ser alcanzables, y por tanto los planes y planteamientos exitosos. Las características que los objetivos tienen que cumplir, como enumerados en la entrada mencionada son:
- Realistas.
- Positivos.
- Específicos.
- Medibles.
- Orientados.
- Minimizar el impacto ambiental.
- Planificados en el tiempo.
- Ambiciosos.
Por tanto, para poderles hacer seguimiento y velar por su cumplimiento tenemos que tener en cuenta lo siguiente:
- Detectar los inputs que pueden generar una desviación o incumplimiento de los mismos. Como comentamos en el post anterior, los planes de marketing y los objetivos tienen que ser algo vivos, y el poder llegar a alcanzarlos, en muchos casos depende de los clientes, de la competencia, de la evolución del mercado, de cómo se perciba nuestro producto o servicio… y una larga lista de factores. Una vez que detectemos qué factores son los que influyen en la desviación de cumplimiento de nuestros objetivos, tenemos que tomar decisiones sobre sobre ellos. Hay que hacer revisiones constantes, ya que las desviaciones no siempre tienen que ser negativas. Si hacemos un planteamiento realista, los datos se pueden alterar también de forma positiva, si es así, también tenemos que detectar cuáles son los inputs que generar estos resultados positivos, para usarlos a nuestro favor.
Por tanto, tenemos que tener totalmente controladas las diferentes variables que afectan de forma directa a nuestros resultados. - Revisar la correcta implementación de las acciones. Los resultados obtenidos son el resultado directo de los trabajos llevadas a cabo, por tanto tenemos que hacer una implementación ajustada a la forma en la que la diseñados, para que la desviación de los resultados sea la mínima posible. Si, por ejemplo, vinculamos unos resultados de ventas de un producto a una estrategia implementada en un centro, teniendo en cuenta que se va a producir un tráfico determinado y que, de ese tráfico, nosotros queremos impactar en el 20%, tenemos que trabajar para que todas las condiciones se cumplan para llegar a nuestro objetivo: que haya tráfico, que no haya ninguna marca de la competencia haciendo acciones similares a las nuestras, que el tráfico que se produzca sea afín a nuestro producto… de esta forma nos aseguramos que la nuestra implementación se cierre con éxito.
- Los objetivos de marketing están correlacionados entre sí, es muy poco probable poder lanzar acciones que no afecten de forma directa las unas en las otras. Las estrategias de marketing se deben pensar siempre desde una óptica 360º, por tanto, es muy improbable que las medidas que llevemos a cabo en un ámbito se puedan separar del resultado global. Esto puede interpretarse de forma positiva o negativa, y por tanto, nos puede alterar a la alta o a la baja, por eso es fundamental tenerlo en cuenta.
- Hay que ser ágiles tomando decisiones correctivas. Cuanto más tardemos en reaccionar, más difícil va a ser corregir los resultados, por tanto, el responsable de cumplimiento de estos objetivos tiene que ser una persona con un conocimiento (visión global) de las diferentes acciones que ser realizaran dentro del ámbito (o los ámbitos) que puedan influir directamente a los objetivos propuestos.
- Hay que diseñar un plan de medición y de corrección en función de cada uno de los objetivos propuestos. No es lo mismo incrementar ventas que incrementar notoriedad, no se consigue igual ni se mide igual. Los objetivos pueden ser de diferente naturaleza y así hay que tratarlos.
- Ser realistas en los tiempos propuestos para la consecución de los objetivos, todos los proyectos tienen un proceso de lanzamiento y maduración
- Seguimiento de la inversión. Aunque lo dejamos para el último punto es fundamental tener la partida presupuestaria totalmente controlada, que no se generen desviaciones y que esté generando el rendimiento proyectado.
El seguimiento de los objetivos en marketing es clave, ya que las empresas más exitosas son aquellas que planifican, miden y reinvierten para seguir creciendo, y todas utilizan, de un modo u otro, la disciplina del marketing para ayudarle a conseguir sus fines.
Esperamos que estos puntos os resulten de ayuda, y si queréis o necesitáis ampliar información sobre cómo medir o conseguir vuestros objetivos de marketing, comunicación o publicidad, estaremos encantados de ayudaros.
Directora de Diseño e Implementación