Ayer fue 23 de abril, el día del libro. Seguro que muchos de vosotros, al menos los aficionados a la lectura como lo somos en MarQuid Consulting, sabréis que esta fecha conmemora que tal día del año 1616 fallecieron dos de los más importantes escritores de todos los tiempos, Miguel de Cervantes Saavedra y William Shakespeare.
Aprovechando este acontecimiento, nos gustaría sacar los puntos más marketinianos que encontramos en sus obras y que consideramos que han sido la palanca de su éxito y perduración a lo largo de diferentes épocas.
Empezamos nuestro homenaje a estos grandes maestros de las letras.
- Producto excelente, puede gustarte más o menos su estilo o los temas que trataban, pero lo que es un hecho es que crearon una literatura exquisita y que es un placer leer a ambos, a pesar de que han pasado casi 500 años desde que sus obras fueron escritas. Esto es la base para cualquier empresa, ofrecer un producto o servicio de calidad. Si tienes un buen producto, antes o después cuajará e impactará dentro del público objetivo al que va lanzado y por tanto llegará, como las obras de nuestros protagonistas de la semana, para quedarse y hacer mella entre los clientes.
- Gran capacidad de producción: recuerdo que un profesor de literatura que tuve en su día me contó una anécdota de Cervantes que se me quedó totalmente grabada; tenía la capacidad de escribir una obra en un día. Tanto Cervantes como Shakespeare, tienen un importantísimo número de obras publicadas lo cual resulta impactante sobre todo teniendo en cuenta que ninguno de los dos tuvo vidas excesivamente longevas, sobre todo el escritor inglés quien falleció con 52 años. Este punto es tremendamente importante dentro del mundo empresarial; para tener éxito no sólo basta con abrir el mercado, hay que saber mantenerlo, ofreciendo productos y servicios que resulten interesantes para los clientes actuales y futuros, así como poder abastecer la demanda para no “morirse de éxito”.
- Variedad de registros, a pesar de sus obras cumbres por las que son recordados después de siglos, ambos han sido muy fructíferos en diferentes registros: novela, teatro, obras históricas, tragedias, novelas de fantasía, poesía… con esto conseguían llegar a una gran amplitud de públicos. Dentro del mundo empresarial, la estrategia de diversificación es empleada por un buen número de empresas que apuestan por hacer diferentes líneas de negocios dentro de sus compañías para poder cubrir diferentes necesidades de sus públicos o bien captar nuevos clientes. La toma de este tipo de decisiones ha de ser muy meditada, ya que si esta apertura de mercados se hace de una forma precipitada podemos perder el esfuerzo invertido en esta nueva área, así como perder la credibilidad e imagen de marca creada en el área en la que ya estaba consolidada la empresa. Shakespeare y Cervantes eran brillantes, y eran capaces de crear obras maestras en los diferentes registros en los que publicaban. Éste es el ejemplo a seguir, si nos embarcamos en un nuevo sector, área o proyecto, tenemos que asegurarnos de estar a la altura para no dañar la reputación creada previamente.
- Temas que trasgreden a las épocas, si hoy lees obras como Don Quijote de la Mancha, Hamlet, Romeo y Julieta… serás capaz de sacar ciertas similitudes con situaciones reales en la actualidad: historias de amor, de familias rivales, de venganzas, de héroes… son temas que se han ido repitiendo a lo largo de la historia de la literatura y nunca pasan de moda. Las empresas evolucionan, hay nuevas tendencias y sobre todo una revolución generada desde la parte digital y de internet, pero hay una serie de máximas que han de mantenerse a lo largo de los tiempos y han de formar parte del ADN de cualquier empresa que quiera ser exitosa y mantenerse a lo largo de los años: una buena atención al cliente, una imagen de marca fuerte y consolidada, seriedad en la prestación de los servicios y un largo etcétera que hacen que las empresas puedan crecer y se consolidarse.
- Altas dosis de creatividad, los libros son imaginación, las ideas fluyen dando vida a personajes y situaciones en donde se plantean soluciones que son interpretadas por cada uno de los lectores o espectadores de forma diferente; incluso es habitual que las grandes obras de la literatura, como es el caso de las que estamos tratando en este post, sean leídas en repetidas ocasiones, aportando al lector cosas bien diferentes según el momento en que se lean. Los productos y servicios tienen que tener exactamente la misma dosis de creatividad para que se adapten y sean reutilizados por el consumidor en más de una ocasión, han de ser creados para que nuestros “lectores” nos quieran leer de forma regular, tenemos que enamorar al cliente o consumidor, para que al igual que sucede con Don Quijote de la Mancha o Romero y Julieta, nos quieran comprar al menos una vez cada cierto tiempo.
Por supuesto podríamos escribir muchísimo sobre todos las lecciones de marketing que podríamos encontrar en las obras de estos maestros, pero queríamos destacar los puntos más relevantes, que bajo nuestro marketiniano punto de vista, nos pueden aportar.
Como siempre será un placer leer vuestros comentarios, cualquier duda, proyecto o problema que os surja, relacionado con el marketing, la comunicación y la publicidad, ya sabéis que nos podéis contactar en info@marquid.com.
No nos vamos sin recordaros, que ¡sólo quien sabe a dónde va, elige el mejor camino!
Directora de Diseño e Implementación
