Este viernes, como cada viernes, analizamos las lecciones de marketing que podemos encontrar en los libros, películas o series con los que estamos en contacto habitualmente y que más nos gustan.
Cada semana queremos ir haciendo un homenaje a aquellos escritores, directores o tramas que más nos han llamado la atención, y hoy queremos rendir homenaje a uno de nuestros escritores más exquisitos y deliciosos para leer, Antonio Gala.
Dentro de su extensa obra hemos elegido su libro Más allá del jardín, escrito en el año 1995 y del que se hizo una película en el año 1997, nominada a cinco Goyas y ganadora de dos.
La obra gira en torno al personaje de Palmira Gadea, una aristócrata sevillana, con una vida aparentemente perfecta. La historia es completamente personalista, centrándose en Palmira, su ascendencia y descendencia, su futuro, presente y pasado, su aparente perfección y su real desdicha.
Por la naturaleza de la obra, centrada totalmente en la imagen construida por las familias de alta aristocracia, nos viene perfecta para sacar lecciones de marketing. Comencemos con ellas.
Creación y mantenimiento de la marca, Palmira Gadea pertenece a una familia de la alta sociedad sevillana. Ella es muy consciente de la necesidad de mantener la imagen de cara a la galería y cueste lo que cueste, porque no quiere bajar el listón en el que está posicionado el nombre de su familia. El rol que desempeña es el de mantener el nivel en el que están posicionados y no bajar del mismo, actividad que se le convierte en muy difícil, por la evolución de los tiempos actuales, en los que la pleitesía rendida a dichas castas es bien diferente a hace unos años. Esto es un punto muy a tener en cuenta en marketing. La imagen de una empresa no sólo hay que construirla, sino también saber mantener el legado. Hoy en día podemos ver muchas marcas que gozaron de alto prestigio en su momento, pero que no han sabido seguir o adaptarse a la evolución de los tiempos, lo que las convirtió en compañías vetustas y avocadas al fracaso y a la desaparición. Hay que saber construir una imagen coherente a los valores de las compañías, pero también hay que saber mantenerlas.
- Importancia de la comunicación interna: buena parte de los problemas principales que ha sufrido Palmira en su vida reciente es por falta de comunicación con su familia más directa, falta de entendimiento con sus hijos y con su marido. Esto poco a poco generó que empezara a convertirse en la comidilla de los círculos sociales más altos, por todo lo que se estaba generando a su alrededor y de lo que ella misma no era consciente. La persona que sí mantenía los pies en la tierra y con la que tenía una fluida comunicación era con la mujer que la había criado tanto a ella como a sus hijos y cuyo fallecimiento se convierte en la piedra que hace que se tambaleen sus propios cimientos. Esta lección es de suma importancia en comunicación empresarial. Hay un alto número de compañías que centran todos sus esfuerzos en comunicar hacia fuera, qué son, qué hacen, qué productos tienen, sus logros, sus expansiones…pero descuidan, al igual que Palmira, lo más importante: su “familia”, los trabajadores, las personas que hacen posible que esas empresas den el rendimiento que están dando, y esto puede convertirse en un problema gravísimo y que puede suponer quebrantos importantes al interior de las empresas. Por tanto, hay que ser conscientes que la comunicación que haya hacia dentro es tan o más importante que la que se genera hacia el exterior, y lo más importante es que hay que intentar generar flujos de comunicación bidireccionales, es decir, hablar y escuchar con todos aquellos que forman el equipo humano de las organizaciones.
- Capacidad de reponerse a las adversidades, gestión de crisis, prácticamente de un día para otro el mundo de cristal en el que vivía la protagonista del libro se empieza a desmoronar, y esto es algo que a ella le supone un varapalo tremendo del que prácticamente no se recupera. Dentro de las organizaciones pueden generarse situaciones (unas totalmente previsibles y otras prácticamente imposibles de detectar) que pueden crear momentos de gran adversidad, por ello es de alta importancia que la gerencia sea consciente de la importancia de contar con manuales de crisis, documentos que preparan a las compañías para actuar de forma prácticamente inminente ante adversidades que puedan surgir, tales como: fallecimiento de trabajadores o personal relacionado con su actividad por causas directamente relacionadas con la compañía, escándalo relacionado con algún trabajador, incidencias por parte del consumidor con el producto… y frente estas situaciones, lo que se haga en las primeras 24 horas es crucial, por ello hay que hacer una planificación previa para actuar de una forma rápida, determinar qué hacer, cómo hacerlo y quién ha de dar la cara.
- Actuar de forma coherente, Palmira hasta los últimos años de su vida se comportó como se esperaba de ella, al menos de cara a la galería. Era una señora que se movía en unos determinados círculos, vestía de una determinada manera, participaba de ciertas actividades… esta es la forma en la que han de comportarse las empresas, siendo lógicas con lo que ofrecen y con el sector al que se dirigen. La imagen, el lenguaje y la actitud ha de ser afín a la filosofía y al core target, para que de esta forma el impacto sea mayor, los clientes potenciales se identifiquen con la marca y generar el mayor engagement posible, de tal forma que además de generar clientes, estos se fidelicen con la marca.
Bajo nuestro punto de vista estas son las lecciones más importantes que, de forma encubierta, nos da Antonio Gala a través de su libro. Esperamos que os sirvan para reflexionar sobre estos puntos y que podáis aplicarlo de forma directa.
No nos vamos sin recordaros nuestra máxima ¡sólo quien sabe a dónde va elige el mejor camino!
¡Quedamos a la espera de vuestros comentarios y sugerencias!
Directora de Diseño e Implementación